CENTAURO: Equid introduction, hybridisation and agricultural intensification in the Ebro valley from the late Neolithic to the Iron Age
- Investigadora Principal: Ariadna Nieto Espinet (Grup d'Investigació Prehistòrica (GIP), Departament d'Història, Universitat de Lleida). Los équidos (caballos, burros y mulos) son especies muy versátiles. Las investigaciones actuales sugieren que los primeros caballos domésticos aparecieron en las estepas euroasiáticas hace unos 5000 años (Outram et al. 2009). Desde entonces, y a lo largo de la historia reciente, los équidos han realizado múltiples tareas. Los équidos también tienen una gran cantidad de simbolismo, ya que no solo eran animales de trabajo, sino elementos de prestigio y compañeros esenciales tanto en la vida como después de ella. A lo largo de la época contemporánea y la antingüedad, los équidos han contribuido al desarrollo de las economías rurales como elementos esenciales de sistemas agrícolas sostenibles y mejor interconectados. ¿Fue este también el caso de las comunidades prerromanas del valle del Ebro? El momento en que se introdujeron los équidos y cómo se integraron en los sistemas agrícolas locales del NE de Iberia sigue siendo en gran parte desconocido. ¿Fue su implantación una respuesta a nuevas necesidades socioeconómicas o un estímulo que contribuyó decisivamente a los procesos de expansión, desarrollo e integración económica que caracterizaron el inicio de la Edad del Hierro? CENTAURO evaluará el impacto de la domesticación y tracción animal con équidos en el desarrollo de las economías humanas en diferentes periodos históricos. Se trata de un área que ha aportado excepcionales y singulares hallazgos arqueológicos que evidencian una intensa interacción entre humanos y equinos durante el Neolítico Superior, y una incipiente cría de caballos en la Primera Edad del Hierro en el marco de los primeros casos de urbanismo y centros fortificados de poder. Este proyecto pretende estudiar restos óseos de équidos de diferentes yacimientos arqueológicos del NE de Iberia (actuales Aragón y Cataluña) entre el Neolítico Superior y el periodo ibérico (2900 cal aC - 200 aC). Por ello, a través de un enfoque innovador y multidisciplinar, CENTAURO analizará los procesos de introducción del burro junto con los cambios en los patrones de manejo, dieta y movilidad de los équidos a lo largo de un amplio marco temporal y territorial. Los yacimientos datados entre el Neolítico Superior y la Edad del Hierro conservan el mayor número de restos de équidos, pero el análisis de los yacimientos del Neolítico Superior y de la Edad del Bronce Medio nos permitirá evaluar el impacto real de las influencias de otros puntos del Mediterráneo sobre los sistemas culturales de la Valle del Ebro. La viabilidad y el impacto del proyecto se benefician del apoyo y una estrecha colaboración entre arqueólogos, biólogos, ganaderos, criadores y veterinarios especialistas en équidos. Una comprensión del impacto de la domesticación y gestión de los équidos en el desarrollo y expansión de los sistemas económicos y culturales prehistóricos en el NE de Iberia valorará los usos económicos tradicionales de los equinos, hoy muy amenazados. Este es un reto para las administraciones públicas y los ganaderos que, en los últimos años, han centrado sus esfuerzos en crear programas de conservación en el marco de acuerdos nacionales e internacionales (BOE-A-2019-2859). Este proyecto valorizará uno de los aliados más vitales de las sociedades rurales y ayudará a reforzar la sostenibilidad ganadera al priorizar las razas equinas locales compatibles con los ecosistemas locales.